El láser de estética, las cuchillas de afeitar, las cremas depilatorias, las bandas frías, las resinas y la cera caliente son sistemas de depilación altamente agresivos para la piel.
La piel es un órgano que nos protege de los agentes externos, y muchas veces, un mal sistema de depilación puede irritarla, erosionarla o acarrear problemas más graves, como enquistamientos del pelo, engrosamiento de la capa córnea, quemaduras y flacidez de los tejidos blandos ( descuelgue muscular).
El objetivo de la depilación es extraer el bulbo del interior de la piel sin dañarla y para eso es necesario recurrir a sistemas más respetuosos, como la cera tibia.
-Láser de estética:
El láser de estética es un aparato de luz pulsada dirigido directamente al bulbo para quemarlo. El problema es que no todas las pieles son capaces de resistirlo, y en estas se producen quemaduras, algunas de ellas graves. Solo un médico dermatólogo especializado podría indicar si la piel podría resistir una sesión láser.
-Cuchillas de afeitar:
Las cuchillas de afeitar constan de mango y cabeza compuesta por varias cuchillas que cortan el pelo a ras de piel. El problema es que, al cortar el pelo, este se fortalece hasta convertirse en barba. Su uso debería ser esporádico.
Además, también pueden erosionar la piel.
-Las cremas depilatorias:
Las cremas depilatorias son productos químicos con componentes abrasivos destinadas a quemar el pelo. El problema es que también se quema la piel, aunque, actualmente, estos productos introducen sustancias secuestrantes que camuflan sus efectos secundarios. Su uso debería ser mínimo y limitado a zonas corporales de alta resistencia.
-Bandas frías y resinas:
Las bandas frías son papel impregnado de resina o cera fría que parten el pelo en lugar de extraerlo de raíz, por lo que se fortalece convirtiéndose en barba.
Su uso debería reservarse para ocasiones especiales.
-Cera caliente:
La cera caliente es un producto con componentes derivados de la cera de abejas que extrae el pelo de raíz. Para aplicarla necesita llegar a un punto de fusión determinado. El problema es que algunas tienen un punto de fusión demasiado alto y queman la piel. Su uso debería estar limitado solo a profesionales con suficiente experiencia.
El uso indiscriminado de estos sistemas de depilación, en manos inexpertas, puede llegar a ser peligroso, desde las quemaduras más superficiales hasta las varices más profundas.
Cualquier profesional experimentado puede evitar que el cliente sufra tanto dolor.
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Correo electrónico: javieraresestilista@gmail.com
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